Hotel Ibis Paris Bastille Opera 11Ème

“Grata experiencia con un toque *agridulce”

Estancia placentera El hotel: Muy bien ubicado, en una zona con muchos comercios cercanos, restaurantes, panaderías, supermercado, etc. También hay cerca paradas de líneas de autobuses como la 69 que tiene un recorrido por muchas zonas céntricas de París como el Louvre. También a unos 15 o 20 minu… Más

Estancia placentera El hotel: Muy bien ubicado, en una zona con muchos comercios cercanos, restaurantes, panaderías, supermercado, etc. También hay cerca paradas de líneas de autobuses como la 69 que tiene un recorrido por muchas zonas céntricas de París como el Louvre. También a unos 15 o 20 minutos andando se puede visitar la Plaza de la Bastilla y la casa de Victor Hugo. El hotel es un lugar agradable, con una decoración donde destaca el verde, las plantas y los acabados en madera, ambientado en todo momento con buena música agradable de escuchar. Habitaciones: Pequeñas, pero el poco espacio está muy bien aprovechado para proporcionar confort, comodidad y un sueño placentero. Además, la limpieza es muy esmerada. Se echan en falta más toallas, ya que para una habitación doble solo ponen tres: una para los pies para colocarla en el suelo y dos para secarse al ducharse, para cara y manos no ponen toallas. Restauración: Fuimos en régimen de media pensión, una rareza en París ya que casi ningún hotel lo ofrece. El desayuno, poco vsriado pero muy completo con bollería recien hecha, surtido de mermeladas, frutas, quesos, salchichas, fiambres, huevos, etc., y un buen surtido de panes. El café es muy bueno, molido directamente en la máquina. En cuanto a las cenas poco variadas, siempre es la misma carta, aunque todo está exquisito. Si eres un amante de la cerveza muy fría y bien tirada, ni en el restaurant del hotel y en ninguno de los sitios de París donde bebí cerveza la sirven así. Una lástima pagar 7€ de media, o más, por una cerveza poco fría y toda caldosa 😠 En cuanto a la atención del personal, los camareros muy atentos, preocupados y cordiales, en especial Buthan y Boris, dos profesionales de primera, muy simpáticos y esmerados en todo momento por dar lo mejor de si. Cabe destacar que, además del francés, hablan inglés y español. Inmejorables. Servicio en recepción: Personal muy atento y amable. Algunos de ellos hablan español. *Un incidente decepcionante: El martes 09/07/2024, día del partido de semifinal entre Francia y España, en el restaurant anunciaron el partido para verlo en pantalla gigante. Bajamos a cenar a las 20:50 y acabamos cenando a las 22:00. El restaurante estaba a tope de gente viendo el partido, al menos unas 60 personas de pie viendo el encuentro, otros sentados en las mesas esperando la cena, y fuera en la terraza otro montón de gente, y un solo camarero para todos, Boris. Ese chico iba literalmente dando carreras por todo el local, tomando órdenes de las mesas, sirviendo, recogiendo y hasta ayudando a atender en la barra. Estaba desbordado el bueno de Boris. Desde luego fue una falta de previsión por parte de la dirección del hotel, una metedura de pata en toda regla y un despropósito la forma como se gestionó todo en el restaurante aquella noche. Nos pareció una falta de consideración que a los clientes alojados en el hotel, que teníamos ya pagada la cena, nos dejaran en segundo lugar en las mesas esperando mientras no dejaban de despachar a todos los que entraban de la calle a ver el partido. Cuando el camarero, Boris, nos trajo la cena, ya estaba casi fría, y nos la comimos porque teníamos hambre y no íbamos a perder más tiempo pidiendo que la calentaran. Lo más lamentable e indignante que tuvimos que presenciar, es que mientras el pobre camarero andaba todo agobiado y atacado por el exceso de trabajo, las chicas de la recepción y el personal de la barra estaban viendo el partido y echándose unas risas, viendo de vez en cuando al compañero desbordado con cierta compasión en vez de echarle una mano y ayudar a sacar la faena. Muy triste la falta de compañerismo. Boris nos sirvió todo lo que pedimos, con retraso, pero cumplió como un campeón, y lo mejor de todo, sin dejar de sonreír. Ese chico es todo un profesional, preocupado por darlo todo en su trabajo. Por nuestra parte, un buen tirón de orejas para sus compañeros y para la dirección del hotel.

Menos

“Hotel con sombras y luces”

Hotel con sombras y luces. Si sabes inglés o francés no tendrás problema con los recepcionistas. De lo contrario... No saben español. Habitación pequeña y cuarto de baño de juguete. Eso sí, ambos muy limpios. Además, te cobran por dejar las maletas en consigna. Algo que nunca nos había sucedido.

“habitaciones MUY PEQUEÑAS”

Las habitaciones son muy pequeñas al igual que el baño, si lleva maletas grandes no tendrá espacio para moverse. Lejos de todo ... para tomar el metro son unas 10 cuadras El desayuno es correcto las mesas son algo incómodas Las informaciones que nos dieron en la recepción no fueron buenas