Hotel Rural El Mondalón

“Conectar con la Paz”

Nos costó un poco adaptarnos a tanta tranquilidad, al final lo logramos. El personal excelente, Ismael un puntazo, Agustín y María fantásticos. Choca que en un hotel de 4* el jardinero, un chico, responsable, amable, educado tenga que hacer de recepcionista, esto baja la categoría que no debiera de… Más

Nos costó un poco adaptarnos a tanta tranquilidad, al final lo logramos. El personal excelente, Ismael un puntazo, Agustín y María fantásticos. Choca que en un hotel de 4* el jardinero, un chico, responsable, amable, educado tenga que hacer de recepcionista, esto baja la categoría que no debiera de ser sino 3*. La recepción cerrada en horas que se debía hacer la salida, o entrada. La molestia de que frente al lugar de desayuno, empresas externas se dediquen a montar mesas para una boda, con lo que la paz y las vistas quedan empañadas. Bien podrían comenzar una vez finalizado el desayuno. El restaurante ajeno al hotel muy, muy rico los platos enormes y con muy buena calidad, la cercanía del personal, nos hicieron sentir muy cómodos. Preguntamos porqué no llevaba mascarilla uno de sus propietarios y con mucha educación nos dió explicaciones y nos mostró su certificado, pese a que no hacía falta. Prefiero preguntar a criticar sin saber. No nos gustó nada que tuvieran que venir a desatascar algo de la zona donde se celebraría la boda al día siguiente, pese a que pudiera ser fortuito bien podría haber sido en horario que no molestase a los comensales, el olor era muy desagradable. Repetiremos en el restaurante seguro, en el hotel ya veremos si corrigen sino, no.

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“Un lugar para desconectar”

He tenido el enorme placer de trabajar y dormir en este coqueto hotel rural y no pudo gustarme más. Los espacios abiertos a la naturaleza son preciosos y se respira aire casi puro. Sus habitaciones son acogedoras y entra una luz por la mañana que te deja sin palabras. La única pega que les pongo … Más

He tenido el enorme placer de trabajar y dormir en este coqueto hotel rural y no pudo gustarme más. Los espacios abiertos a la naturaleza son preciosos y se respira aire casi puro. Sus habitaciones son acogedoras y entra una luz por la mañana que te deja sin palabras. La única pega que les pongo es la actitud de sus camareros, no parecían muy dispuestos a ayudar y los desayunos me parecían que tenían pocas opciones y sobre todo, para los celiacos, casi imposible comer. - Comodidad 100% - Desconexión asegurada - Piscina on point

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“Desconexión a un paso de Las Palmas”

Pequeño hotel de bonita arquitectura canaria, sin grandes pretensiones pero muy agradable. El techo de madera de la habitación una maravilla, mis hijos se sentían como en una cabaña! Personal muy dispuesto y amable, aunque algo escaso en fin de semana. Buenos desayunos, aunque una pena el zumo arti… Más

Pequeño hotel de bonita arquitectura canaria, sin grandes pretensiones pero muy agradable. El techo de madera de la habitación una maravilla, mis hijos se sentían como en una cabaña! Personal muy dispuesto y amable, aunque algo escaso en fin de semana. Buenos desayunos, aunque una pena el zumo artificial… el restaurante bien, comida de calidad, pero ojo raciones gigantes! Perfecto el hotel como base de operaciones (a un paso de la caldera de Bandama por ejemplo…). Volveremos, hemos desconectado muchísimo. Por cierto, las camas supletorias las mejores que nos han puesto en ningún hotel.

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