Ciudad situada a ambos lados del río Rhin, ofrece uno de los paisajes más románticos y atractivos de Alemania: el Valle Medio del Rin, Patrimonio Mundial de la Unesco desde 2002. Uno de sus principales puntos de interés es el casco antiguo de la ciudad, unido al entorno de la plaza de San Florín, la Liebfraunkirche, y la Jesuitenplatz, conserva algunas edificaciones de interés artístico e histórico.